Yo también he
dicho lo mismo. Amanecí cansado, no pude dormir bien, está haciendo mucho frío,
parece que va a llover, el viento esta fuerte, eso mejor salgo mañana.
Seguro que todos
hemos apelado a una o varias de estas excusas, y es entendible. No es fácil
cambiar la comodidad de la cama por las inclemencias del clima. Sin embargo,
son mayores los beneficios de salir a correr temprano que quedarse a disfrutar
unos minutos adicionales de sueño. Ahora, ¿porque en la mañana?, ¿acaso no es
lo mismo al medio día, en la tarde o en la noche?. En el corto plazo realmente
es lo mismo, pero me gustaría presentarles algunos aspectos que talvez nos ayuden
a considerar incluir entrenamientos mañaneros y que nos pueden traer beneficios
en el largo plazo.